jueves, 14 de octubre de 2010

MEMORIA, VERDAD Y JUSTICIA

Prisión perpetua para el ex director y otros tres penitenciarios de la U9 

Extraido de:
http://www.pagina12.com.ar/diario/ultimas/20-154906-2010-10-13.html

El Tribunal Oral Federal 1 de La Plata, integrado por Carlos Rozanski, Pablo Bertuzzi y Roberto Falcone, impuso esa condena al ex Jefe de la Unidad 9, Alberto Dupuy, y los agentes Isabelino Vega, Víctor Ríos y Raúl Rebaneyra por homicidios, tormentos y privaciones ilegítimas de la libertad, crímenes cometidos entre 1976 y 1979 durante la última dictadura militar, y a los que la Justicia enmarcó en un "genocidio". El resto de los acusados recibió penas de entre 10 y 25 años de cárcel.
Dupuy fue condenado a prisión perpetua por cinco casos de homicidio calificado por alevosía, torturas seguidas de muerte en un caso y tormentos agravados por ser perseguidos políticos en 57 casos.
La misma pena recayó sobre Isabelino Vega por un homicidio calificado, un caso de torturas seguida de muerte y tormentos en otros 54 casos, lo mismo que Victor Ríos por un caso de homicidio calificado, una de torturas seguido de muerte y tormentos agravados en 55 casos.
El Tribunal condenó también a prisión perpetua a Raúl Aníbal Rebaneyra por un homicidio calificado y 20 casos de tormento agravado. Además, penó con 25 años de prisión a Elvio Cosso por tormentos agravados en 43 casos y tortura seguida de muerte; a Catalino Morel por omisión de tortura seguida de muerte y a Ramón
Manchado Fernández por un caso de torturas seguida de muerte y tormentos agravados en otros 13 casos.
En tanto, el Tribunal sentenció por tormentos agravados en varios casos a Jorge Luis Peratta a 14 años de prisión; a Segundo Andrés Basualdo a 11 años y a 10 años de prisión a Valentín Romero y Héctor Acuña.
También les impuso 13 años de prisión a Carlos Domingo Jurio, Enrique Leandro Corsi y Luis Domingo Favole, los tres médicos juzgados por omisión de torturas seguida de muerte, a quienes les ratificó que deberán seguir detenidos.
En la lectura del veredicto, que se extendió por casi 40 minutos, el presidente del Tribunal, Carlos Rozansky, anunció que "atento a la magnitud de las penas impuestas se revocará la prisión domiciliaria de Elvio Cosso, Isabelino Vega y Ramón Fernández y Valentín Romero".
Los fundamentos de la sentencia, en cuya lectura estuvo presente el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Luis Eduardo Duhalde, se darán a conocer el próximo 23 de noviembre.
Los once agentes penitenciarios y tres médicos que se desempeñaban en la unidad 9 de La Plata comenzaron a ser juzgados en abril pasado por los homicidios de Horacio Rapaport, Juan Carlos Deghi, Ángel Georgiavis, Rufino Pirles y Dardo Cabo; la muerte por torturas de Alberto Pinto y la privación ilegítima de la libertad y torturas a más de 80 ex presos políticos.
El penal platense fue una de las cárceles que recibió más presos políticos durante la última dictadura militar, debido a que los detenidos provenían de otros centros clandestinos de detención y al llegar a ese penal eran "blanqueados", aunque las torturas continuaban.
Varios de los detenidos que fueron liberados eran asesinados a la salida de la prisión, con el fin que quedara asentada su salida formal de esa unidad carcelaria.
Durante las audiencias, el Tribunal oyó a más de un centenar de testigos, entre ellos Francisco "Barba" Gutiérrez, Carlos Slepoy, Juan Miguel Scatolini, Eduardo Jozami, Eduardo Anguita, el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel y el ex canciller Jorge Taiana, quien relató sus días de cautiverio en el "pabellón de la muerte" de esa unidad y dio detalles sobre las ejecuciones de cuatro compañeros.
Tras recordar una violenta requisa sufrida el 13 de diciembre de 1976, donde fueron golpeados todos, quedó alojado en ese sitio, llamado "Pabellón de la Muerte" porque "de ahí sacaban gente que era ejecutada extrajudicialmente. Eramos 14 personas, mataron a 4", consignó.
En otro relato, Pérez Esquivel, quien estuvo detenido en la unidad 9 a disposición del Poder Ejecutivo Nacional (PEN) desde el 5 de abril de 1977 hasta fines de junio de 1978, recordó que estuvo a punto de ser asesinado en un "vuelo de la muerte".
"Lo más shockeante de la prisión era oir los gritos de los compañeros que eran golpeados", recordó, y remarcó que "en el penal había un sistema para quebrarnos, moral, psicológica y humanamente".
Finalmente, el 27 de septiembre último comenzó la etapa de los alegatos y ese día los fiscales Marcelo Molina y Hernán Shapiro pidieron 25 años de prisión para el ex jefe del penal 9 de La Plata Abel Dupuy; Ramón Fernández, Catalino Morel, Raúl Rebaynera, Víctor Ríos e Isabelino Vega.

viernes, 8 de octubre de 2010

MATRIX, FILOSOFIA Y CINE

 El film  Matrix tiene una fuerte base filosófica y cultural. Veremos qué ideas y qué filósofos están vinculados con ella. Proponemos el estudio de un  problema  filosófico clásico:

•      EL PROBLEMA DEL CONOCIMIENTO DE LO REAL
(The Matrix): Platón y Descartes

1. PLATÓN Y EL MITO DE LA CAVERNA

  El mito de la caverna de Platón es uno de los puntos importantes a la hora de desentrañar Matrix. En él se narra cómo unos esclavos viven en una cueva creyendo que lo que ven (unas sombras proyectadas en una pared) es la realidad cuando lo cierto es que viven engañados.
          Pero uno de ellos escapará y verá la luz del sol, entonces volverá para rescatar a los otros, pese a que corra el riesgo de que lo maten por no creerle.

          Y eso le ocurre a la humanidad. Esa es la verdad, como dice Morfeo: Eres un esclavo, Neo. Igual que los demás, naciste en cautiverio. Naciste en una prisión que no puedes ni oler ni saborear ni tocar. Una prisión para tu mente.
Pero Neo es el esclavo que saldrá de la caverna y rescatará a sus compañeros. De todos modos, Morfeo le advierte del peligro: Son las mentes de los mismos que intentamos salvar. Pero hasta que no lo hagamos, siguen formando parte de ese sistema y eso hace que sean nuestros enemigos. Tienes que entender que la mayoría ellos no están preparados para ser desenchufados. Y muchos están tan habituados, dependen tan absolutamente del sistema, que lucharían para protegerlo. 

2. DESCARTES Y EL PROBLEMA DEL CONOCIMIENTO DE LO REAL

          Como hemos dicho más arriba, el tema filosófico por excelencia en la película The Matrix es el problema de lo real. Así lo expresa Morfeo:
          ¿Qué es real? ¿De qué modo definirías real? Si te refieres a lo que puedes sentir, a lo que puedes oler, a lo que puedes saborear y ver, lo real podría ser señales eléctricas interpretadas por tu cerebro.
          Hay muchos filósofos que se han planteado este asunto, pero sin duda es René Descartes el que más puntos de unión guarda con la película. La pregunta clave es: ¿cómo distingo la realidad de los sueños? Descartes vivió atormentado con esta cuestión:
          ¡Cuántas veces me ha sucedido soñar de noche que estaba en este mismo sitio, vestido, sentado junto al fuego, estando en realidad desnudo y metido en la cama!
          De ahí derivó su duda metódica y así llegó su ya famoso Cogito, ergo sum (Pienso, luego existo).
          En su Discurso del método, intentó resolver el problema poniendo en duda todo cuanto conocía: Considerando que todos los pensamientos que nos vienen estando despiertos pueden también ocurrírsenos durante el sueño, sin que ninguno entonces sea verdadero, resolví fingir que todas las cosas que hasta entonces habían entrado en mi espíritu no eran más verdaderas que las ilusiones de mis sueños.
          En efecto, Matrix se plantea también esa duda entre la realidad y la ficción. El papel de Descartes lo interpreta Neo, a quien le atormenta la misma sensación. Así se lo expone a su colega Choi en una de las primeras secuencias del film: ¿Alguna vez has tenido la sensación de no saber con seguridad si sueñas o estás despierto?
          Morfeo también pone el dedo en la llaga y le pregunta a Neo acerca de ese tema: ¿Alguna vez has tenido un sueño, Neo, que pareciese muy real? ¿Qué ocurriría si no pudieras despertar de ese sueño?, ¿cómo distinguirías el mundo de los sueños de la realidad?
          Pensó este filósofo que, una vez planteada la hipótesis de que había sido engañado, no podía haber sido Dios quien hubiese perpetrado el engaño, sino el genio maligno: Supondré, pues, no que Dios, que es la fuente suprema de la verdad, me engaña, sino que cierto genio o espíritu maligno, no menos astuto y burlador que poderoso, ha puesto su industria toda en engañarme (...) Por lo cual, con gran cuidado procuraré no dar crédito a ninguna falsedad , y prepararé mi ingenio tan bien contra las astucias de ese gran burlador, que, por muy poderoso que sea, nunca podrá imponerme nada.

2.1 El genio maligno
         Matrix es una mentira, y esa mentira ha sido creada por las máquinas, ellas son el genio maligno, las que han puesto toda su industria en engañar a la humanidad. ¿Qué hacer? Dice Descartes que no dar crédito a ninguna falsedad y preparar el ingenio para ello. En efecto, en Matrix, cualquiera que sea desconcetado, incluido Neo, ha de pasar por una serie de entrenamientos iniciáticos que tienen lugar gracias a programas informáticos creados para tal efecto. El objetivo de esos programas es hacer que el recién llegado se acostumbre a pensar que lo que ve no es real y que, si es consciente de ello, podrá subvertir las leyes físicas y realizar verdaderos milagros.
          Sin embargo, comenta Descartes que:
          Este designio es penoso y laborioso, y cierta dejadez me arrastra insensiblemente al curso de mi vida ordinaria; y como un esclavo que sueña que está gozando de una libertad imaginaria, al empezar a sospechar que su libertad es un sueño, teme el despertar y conspira con esas gratas ilusiones para seguir siendo más tiempo engañado.
          Sí, es difícil vivir cuando ya se sabe la cruel verdad. Eso le pasa a un personaje vital en la trama de Matrix, Cifra, el traidor, el que conspira con esas gratas ilusiones (los agentes) para seguir siendo más tiempo engañado.

2.2. Dualismo cartesiano
          Descartes suele oponer a cuerpo la palabra âme (alma) o la palabra esprit (alma o mente). Es, por tanto, una mente con tientes religiosos la que Descartes intenta relacionar con el cuerpo. Sobre el tema, dice:
          No estoy metido en mi cuerpo como un piloto en su navío, sino tan estrechamente unido y confundido y mezclado con él, que formo como un sólo todo con mi cuerpo.
          Así, mente y cuerpo dependen el uno del otro. De este modo lo ve Morfeo, quien asegura en la película: El cuerpo no puede vivir sin la mente. En otra ocasión, Morfeo, en un intento de que Neo avance en su aprendizaje, le dice: Libera tu mente.

2.3 Argumento ontológico
          Sobre el argumento ontológico y la idea de Dios, diremos que Descartes establece que Dios existe y recuerda que, según el argumento ontológico, si Dios es perfecto, debe existir porque la idea de existencia está incluida en su esencia. Así, nosotros, seres imperfectos, hemos sido creados por un ser perfecto: Dios. pero en la película, el agente Smith (personaje muy importante, cuyo monólogo al capturar a Morfeo es soberbio) invierte el argumento ontológico y se pregunta cómo unos seres tan imperfectos como los humanos hemos podido crear a las máquinas.

2.4. Libre albedrío
          En otro orden de cosas, el tema del libre albedrío también inquietaba a Descartes. Esto es, partiendo de que creemos que dios existe y que Él sabe todo lo que va a pasar, ¿cómo podemos ser libres los humanos si nuestro destino ya está escrito? Descartes aseguraba que los humanos no tenemos capacidad para entender esto. Pero eso no impide que a Neo lo tenga loco este dilema, ya que en varias ocasiones se le dice que él es el elegido. Sin embargo Neo se resiste a creerlo. Morfeo le inquiere: ¿Crees en el destino, Neo? Y él responde que no. Sin embargo, poco a poco irá perdiendo seguridad en esta respuesta. 

2.5. Conocimiento del otro
          Una última cuestión que ocupó a Descartes y que también trabajamos, fue el conocimiento del otro. Él se preguntaba cómo podíamos saber que el resto de los humanos no eran máquinas:
          ¿Qué es lo que veo desde la ventana? Sombreros y capas, que muy bien podrían ocultar unas máquinas artificiales, movidas por resortes.
          En Matrix es muy importante ser consciente de que cualquier humano puede albergar dentro de sí a una máquina, para ello está diseñado el programa de la mujer de rojo, donde Morfeo dice: cualquiera, que no desenchufemos puede ser un agente. Dentro de Matrix pueden serlo todos… o ninguno.
      Adaptación del texto
" La filosofía en Matrix.
Una propuesta educativa"de  Concepción Pérez García, Licenciada en Filosofía -
Versión del año 2003:
PÉREZ GARCÍA, C: Filosofía y cine: El problema de lo real. DL AS / 455-03-